
La corte penal internacional, emitió el 17 de marzo una orden de captura contra Putin acusándolo por dos crímenes de guerra, la deportación ilegal de menores y atacar infraestructura civil ucraniana.
Aunque se emitió la orden, las probabilidades de una detención son escasas, pues Rusia no se reconoce como parte de la Corte Penal Internacional y se necesita de la cooperación de países firmantes para llevarlo a cabo.
La orden se da días después de que se evaluara las posibilidades de que Finlandia y Suecia entren a la OTAN. Convirtiendo a los principales vecinos de Rusia como socios de Estados Unidos, y llevar a cabo del artículo 5 que refiere a la defensa colectiva e implica que un ataque contra un aliado es considerado también como un ataque al resto de miembros.
Como si fuera poco, recientemente aviones rusos, derribaron un dron estadounidense sobre el Mar Negro; Taiwán anuncio que comprara armamento a USA, para una posible invasión de China. El colapso de Silicon Valley, la caída de la bolsa de 4,2 % Wall Street y la crisis en el mundo crypto, predice una recesión económica.
Y el ministerio de defensa de China, saca un comunicado diciendo:
"Las armadas china, iraní y rusa realizarán el ejercicio militar marítimo conjunto ‘Lazos de Seguridad-2023’ en el Golfo de Omán. El ejercicio marítimo conjunto ‘Lazos de Seguridad-2023’ se desarrolló a partir de los ejercicios marítimos conjuntos China-Irán-Rusia celebrados dos veces en 2019 y 2022″.
La tensión cada día es más evidente, aumentando las probabilidades de una tercera guerra mundial.