
Cerca de unas 200 millones de mujeres padecen de endometriosis, una enfermedad crónica, inflamatoria y hormonal, que es infravalorada en diagnósticos ginecológicos.
Intensos dolores menstruales o pelvicos, -durante la menstruación e incluso ovulación-, molestias en relaciones sexuales o al orinar, y muchas veces incapacitante, son solo algunos de los síntomas, que de hecho al ser similares a otras enfermedades, se termina dando un error del diagnóstico.
En términos generales, hay un exceso de restos sin salida que quedan en el interior del cuerpo, provocando inflamación constante que el sistema inmune no puede tratar, y su tratamiento tardío puede agravar la situación. Haciendo que en un futuro las mujeres tengan que someterse a una lamparoscopía o histerectomía, cirugías invasivas que perfectamente se pueden prevenir.
Durante las consultas ginecológicas se habla poco y nada de esta enfermedad, y en algunos casos han pasado años hasta que se diagnostique correctamente, haciendo que la calidad de vida para mujeres que lo padecen sea cada vez peor.
Muchas veces, los fuertes dolores menstruales son tratados como normales, y la recomendación, siempre suele ser, la toma de pastillas, o cualquier otro método anticonceptivo hormonal. Que en su mayoría, afecta emocional, física o mentalmente a las mujeres.