
A principios de enero, un violento arresto terminó con la vida de Tyre Nichols, un joven afrodescendiente de 29 años que en principio fue hospitalizado por duras golpizas que le provocaron agentes de Memphis cuando lo detuvieron por "presunta conducción imprudente".
Fue el 10 de enero, pasados tres días del enfrentamiento, que se confirmó el fallecimiento de Nichols. Este viernes, numerosos videos muestran lo sucedido aquel día en el que la policía confrontó a la víctima, golpeándola sin que esta mostrara ningún tipo de resistencia.
Tras la aparición del vídeo, decenas de manifestantes se congregaron frente a la Casa Blanca, con carteles que pedían "fin al terror policial". El presidente Joe Biden, quien llamó a los padres de Tyre Nichols para ofrecerle sus condolencias, se mostró profundamente indignado.
My heart goes out to Tyre Nichols’ family and to Americans in Memphis and across the country who are grieving this tremendously painful loss. There are no words to describe the heartbreak and grief of losing a beloved child and young father.⁰⁰Here’s my full statement. pic.twitter.com/ghROhSGtao
— President Biden (@POTUS) January 28, 2023
Los crímenes raciales ya no son novedad en un país que aun sigue recordando y pidiendo justicia por tantas víctimas como George Floyd o Jayland Walker, asesinado de la misma manera en julio de 2022.
#BREAKING #LA: Smokebomb tossed at #LAPD unit in #DTLA. View from NewsChopper4 and @elianamoreno. #Memphis #MemphisPolice pic.twitter.com/vEEqgviDiH
— Robert Kovacik (@RobertNBCLA) January 28, 2023